Es sabido que enero suele ser el mes de nuestros buenos propósitos, y ojalá también sea el de los buenos gestos, pues como se suele decir un gesto vale más que mil palabras. Pues son con esos gestos, ideas y nuestras oraciones con lo que lograremos cambiar este mundo ayudando a muchos niños y personas que lo necesitan.
Por ello el próximo 26 de Enero la Iglesia celebra la Jornada de Infancia Misionera, la gran fiesta de nuestros niños que ayudan a otros a cumplir sus sueños.