6 de junio de 2011
Unidos en oración con el Papa Benedicto XVI
Queridos diocesanos:
Recordamos con entusiasmo la Peregrinación que hizo el Papa Benedicto XVI a la Tumba del Apóstol Santiago el Mayor. Vino como peregrino de la fe y testigo de Cristo resucitado, buscando confirmarnos en la fe y dejándonos su testimonio y mensaje que hemos tratado de asumirlo filialmente. “Levantemos una mirada esperanzadora hacia todo lo que Dios nos ha prometido y nos ofrece, nos dijo. Que Él nos dé su fortaleza, que aliente esta Archidiócesis compostelana, que vivifique la fe de sus hijos y los ayude a seguir fieles a su vocación de sembrar y dar vigor al Evangelio, también en otras tierras”. En otro momento nos exhortaba diciendo: “A nosotros nos toca hoy seguir el ejemplo de los apóstoles, conociendo al Señor cada día más y dando un testimonio claro y valiente de su Evangelio. No hay mayor tesoro que podamos ofrecer hoy a nuestros contemporáneos” .
Todos los católicos estamos llamados a apoyar al Papa en su ministerio con nuestra oración. El nos confirma en la fe, nos preside en la caridad, y anima nuestra esperanza. En su relevante misión como sucesor del Apóstol San Pedro, conforta constantemente a los cristianos y a todos los hombres de buena voluntad de la tierra con gestos y palabras de extraordinaria solicitud, siempre dispuesto a dar razón de su esperanza en Cristo (1 Pe 3,15). “El auténtico problema en este momento actual de la historia es que Dios desaparece del horizonte de los hombres y, con el apagarse de la luz que proviene de Dios, la humanidad se ve afectada por la falta de orientación, cuyos efectos destructivos se ponen cada vez más de manifiesto. Conducir a los hombres hacia Dios, hacia el Dios que habla en la Biblia: Ésta es la prioridad suprema y fundamental de la Iglesia y del Sucesor de Pedro en este tiempo” .
Las manifestaciones de afecto filial al Papa, encuentran su razón de ser no sólo en su misión de presidir sino también en la actitud de servicio del Siervo de los siervos que lleva el timón de la barca de Pedro, la Iglesia. Servidor del Evangelio y de la esperanza, el Papa acompaña en cercanía y en comunión las preocupaciones, angustias, temores y esperanzas de todos los hombres. Peregrino por el mundo, es portavoz de una extraordinaria cultura histórica y moral en medio de las contradicciones de la época, impulsa el derecho a la vida, la dignidad de persona humana y las libertades fundamentales, y proclama proféticamente el espíritu de reconciliación a través del diálogo y de la humildad en una Iglesia transfigurada, buena samaritana, integrada siempre en la historia y no contra ella, “signo e instrumento de la unión íntima con Dios y de la unidad de todo el género humano”(LG 27).
Este año el Papa celebra el feliz sesenta aniversario de su Ordenación sacerdotal, el día 29 de junio. Con este motivo, uniéndonos a toda la Iglesia, en espíritu de sobrenatural sobriedad, os pido realizar sesenta horas de Adoración Eucarística (continuas o distribuidas) durante este mes de junio a favor de la santificación del Clero y para obtener el don de nuevas y santas vocaciones, procurando hacer concluir este rosario de horas de Adoración Eucarística con la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, el viernes 1 de julio. Este es el homenaje que hacemos al Papa Benedicto XVI.
En este contexto, la Congregación para el Clero nos sugiere que en la Jornada mundial de Oración por la Santificación Sacerdotal que se celebrará en la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, se haga referencia a la figura del Apóstol San Pedro, roca sobre la que Cristo ha edificado a su Iglesia y fundamento de la comunión eclesial.
Os saluda con afecto y bendice en el Señor,
+ Julián Barrio Barrio,
Arzobispo de Santiago de Compostela.
Fuente: Archicompostela.