En el Archivo Parroquial
de Sanxenxo se encuentra un curios libro. Libro que lleva por título
“Inquilinato”. El porque del nombre de inquilinato es por motivo
de que la casa era de propiedad del Arzobispado de Santiago. Y como
tal propiedad, el cura párroco era un poseedor temporal de esta
propiedad, que estaba siempre sujeta a lo dispuesto por su
propietario el arzobispado de Santiago de Compostela. Como tal
inquilino tenía que pagar un canón o pensión, que en este caso era
anual ( en 1900 el canón era de 60 pesetas anuales por la casa y 10
pesetas por la huerta de “Lavapanos”).
Como parte integrante de
la casa vivienda se consideraban las fincas rústicas, entre ellas la
huerta y viña de “Lavapanos” y el monte de “Mouringada”.
Otros bienes fueron añadiendose a finales del siglo XIX como
inversión de las expropiaciones llevadas a cabo para la construcción
de la carretera entre Pontevedra y el Grobe (actual Calle Progreso).
D. Juan Ortigueira, cura
ecónomo en el año de 1871 adquiere un libro en la cantidad de 18
reales en la “imprenta y comercio de D. José Antonio Antuñez”
este establecimiento estaba situado en la Calle del puente nº20,
esquina al nº1 de la calle de San Telmo.
El motivo de tal
adquisición era el dejar constancia de los abundantes gastos
necesarios para hacer la casa rectoral habitable, sobre todo despues
de los “desperfectos del año 1854”.
Sirva como ejemplo uno
de los asientos: En 26 de agosto de 1871 D. Antonio Sanibade de Santa
María de Mojia (Muxia) de la matricula de la Coruña, patrón y
capitán del quechemarín “Pepito” cobra cincuenta reales por el
transporte de 20 hanegas de cal para el emboquillado de la casa
rectoral.
En agosto del año 1872
se rehace el balcón que da a la iglesia y el maestro herrero Antonio
Melendez de Santa Maria a Digna recibió 593 reales por la hechura y
colocación de los dos balcones (el grande y el pequeño) de la casa
rectoral ( constatar que en una descripción anterior se dice que
estos balcones eran de madera, estando el que daba a la iglesia
cubierto con un tejadillo).
Siguen las descripciones
de algunas obras menores, como el arreglo en los muros y en los
cierres de la huerta de lavapanos, hasta que finalmente en el año
1877 D. José Antonio Antuñez es trasladado como cura párroco a San
Salvador de Meis.
Pero antes de su
traslado tendrá que hacer un nuevo gasto. Con motivo de la visita de
Su Magestad el rey D. Alfonso XII a Pontevedra el monarca pasará el
día 1 de agosto de 1877 muy cerca de la villa de Sanxenxo, por lo
cual las autoridades cursaron orden de que se encalasen los edificios
que daban al puerto lo que acarreó nuevos gastos.
Tras un breve periodo de
tiempo en que las funciones de párroco fueron ejercidas por D. José
Carballa como cura ecónomo, llegó a la parroquia D. Manuel Couto
Pazós de Proben, que acometió la reforma interior de todo el
edificio, esta reforma fue ejecutada usando maderas de la mejor
calidad. Otra obra que acometió fué la reforma de la puerta
principal situada en el este y la construcción de una arqueta de
piedra para recoger las aguas sobrantes del vertedero de la cocina.
También adquirió al comerciante de esta villa D. Alfredo Acha dos
libras de pintura blanca y verde y media arroba de aceite de linaza
para pintar los balcones, bastidores de las ventanas y puertas. El
importe fue de 100 reales.
También se adquirió de
D. Francisco Olañeta del comercio de Pontevedra los herrajes,
petador para la puerta principal, y vidrios para los bastidores de la
casa rectoral así como cinco abrazaderas de hierro para sujetar el
antepecho del balcón que da a la iglesia. También se rehicieron las
divisiones interiores techos y tabiques.
En 20 de agosto de 1881
se recompuso el hogar de la cocina obra que ejecutó el maestro
cantero Miguel Rigueira. También se realizaron nuevas divisiones en
la parte oeste, construyéndose nuevas alcobas.
En el año 1894 la
huerta de “lavapanos” es atravesada de este a oeste por el
trazado de la carretera de Pontevedra al Grobe como tambíen lo es la
heredad de Mouringada. Se percive en concepto de expropiación la
cantidad de 1.584 pesetas (6.336 reales) de los cuales 4.300 reales
se emplearan en la construcción de los nuevos muros para el cierre
de la huerta.
También se construirá
la acera que da a la plaza de Martín de Herrera ( espacio
comprendido entre la iglesia, la rectoral y el final de la calle de
la iglesia).
En 1905 era ecónomo de
Sanxenxo D. Manuel Peleteiro. Se realizan pequeñas obras de
mantenimiento, reparación de goteras, encalado, pintura de puertas y
ventanas etc.
En este mismo año de
1905 llega como párroco D. Manuel Carballo Silva. Se construyó el
escusado retrete con paredes de perpiaño, importando la obra la
cantidad de 267 pts. con 70 céntimos.
Entre
los años 1904 a 1906 ejerció su ministerio como cura párroco D.
Manuel Ignacio Carballo Silva, no hay reseñada ninguna obra en el
libro digna de mención hasta la llegada en 1908 del ecónomo D. José
Morgade Pazos en que se asienta la adquisición de 16 varas y media
de percal para confeccionar banderas españolas para colocar en los
balcones y en las ventanas de la casa rectoral. También se menciona
por primera vez el despacho parroquial.
En
1909 llega a la parroquia el sacerdote D. Domingo Cuesta Bonilla, el
cual realiza una importante reforma en el interior de la casa.
También se modifica el património parroquial al ser adquirida unas
fincas donde muchos años mas tarde será edificada el Templo Nuevo
de Sanxenxo. del año 1912 es una copia de la escritura de permuta
otorgada por D. Francisco Alonso Prieto a favor de D. Domingo Cuesta
Bonilla, párroco de Sanxenxo fechada en 25 de Septiembre de 1912,
ante el notario D. Severino N. Otero Echarri (Puente Bayón).
“Al
iglesario de San Ginés de Padriñan pertenece la siguiente finca
rústica: En donde llaman Mouringada, sita en lo que hoy es calle
del Progreso de esta villa de sembradura cinco ferrados y nueve
concas, a labradio y canaveral, equivalentes a treintayseís áreas,
quince centiáreas: limita al norte terreno de Eduardo Torres
Veniecio, sur de Manuel Soto Fernández, este, carretera de
Pontevedra al Grove que el la actualidad denominan en este punto
Calle del Progreso y oeste finca de Jerónimo Iglesias. Y el D.
Francisco Alonso Prieto es dueño por permuta que hizo a D. Benito
Esperón de una finca en “Currás de Abajo” a labradio, secano
viña y robles lugar de la Florida de esta parroquia de Padriñán y
termino municipal de Sanxenxo, la sembradura de siete ferrados y
medio o sea cuarenta y siete áreas, diez centiáreas: limita al
Norte con muro que separa terreno de Dª Carmen Carballa, hoy muro de
sostenimiento y terrenos mas bajos de D. Juan Manuel Sueiro y otros;
sur de los herederos de Fernando de Reis, que antes fue del Sr Duque
de Patiño, muro en medio; Este terreno de los herederos de D.
Eduardo Patiño y viña del Yglesario de Sanxenxo muro en medio; y
oeste los herederos de Sebastián Alvarez, que antes fue de Fernando
Rey y otros, muro interpuesto”.
Desde
el mes de enero de 1917 al día 4 de diciembre de 1917 será cura
ecónomo D. Constante Saelo Barros, del cual no nos consta ninguna
actuación en la casa rectoral. En diciembre de 1917 será nombrado
un nuevo párroco D. Manuel Ascariz Clemente fallecido en su
ministerio el 4 marzo 1936 .En el año 1930 se hace una reforma
general del interior de la casa. También se rehace desde los
cimientos la pared medianera con D. Modesto Pereira, se alargó la
cocina y se rasgó la ventana del vertedero, se hicieron los suelos
de la planta baja en cemento y se arregló el retrete.
Con
la llegada como ecónomo en 1936 de D. Manuel Pérez Rajoan se
realizan obras de mantenimiento como fue el retejado de la casa, así
como la instalación eléctrica en 1939.
En
el mes de diciembre de 1941 llegó a Sanxenxo como cura ecónomo D.
Jesús Loís Cortizo después sería párroco hasta su fallecimiento
el 21 de enero de 1948 no constan en el libro ningún asiento de obra
en la casa rectoral.
El año 1948 fue año Jubilar en Santiago, llegando como cura D.
Manuel Osorio Rodríguez quien abrió una pequeña ventana en la
cocina y procedió al arreglo de las fachadas exteriores. En 1950
llegó como ecónomo d. Manuel Novo Rodríguez del cual no nos
constan actuaciones en la casa rectoral.
D. Amancio Rodríguez Mondelo llegó a Sanxenxo en el año
1951 como cura ecónomo, y párroco a partir del año siguiente.
Durante su estancia al frente de la parroquia se proyectó la reforma
de la casa parroquial. La vivienda había quedado un poco maltrecha
tras un incendio que afecto a la cocina. De este hecho no ha quedado
constancia alguna anotada en el libro de fábrica de la casa quedando
un vacío desde el año 1950 a 1956.
El
día 17 de Diciembre de 1955, llegaba a la parroquia el joven
sacerdote D. Ramón Somoza en
principio llego en comisión de servicio y pronto comenzó lo que iba
a ser su labor en la parroquia de Sanxenxo. El libro de la rectoral
recoge una buena cantidad de obras realizadas en la casa rectoral
rehabilitada en tiempos de D. Amancio. Una de las primeras obras
llevadas a cavo fue la construcción del cuarto de baño, continuando
por la instalación eléctrica y el cambio de la bomba del pozo para
el suministro de agua de la casa, también llevo a cabo una
repoblación forestal en la finca del iglesario cerca de la calle
Progreso.
José Manuel Abel Expósito