Monición de entrada
Bienvenidos, Hermanos, a la Eucaristía dominical. La profecía de Isaías te hago luz de las naciones, para que mi salvación alcance hasta el confín de la tierra”, se cumple en Jesús de Nazaret que el Bautista señala hoy come ¡El cordero de Dios, el que quita el pecado del mundo!, el Hijo de Dios que bautiza con el Espíritu Santo. Estamos en la Semana do Oración por la unidad de los Cristianos, que este año tiene como lema: “Nos trataron con una humanidad poco común” (Ft 28,2).