Domingo XXVI del Tiempo Ordinario A

Monición de entrada

El Señor nos convoca este domingo para celebrar el memorial de su Pasión, muerte y resurrección. Acudamos decididos a su llamada y pidamos que nuestra respuesta sea siempre un sí. Comencemos alegres esta celebración, porque nuestro Dios manifiesta su poder con el amor y el perdón.

Domingo XXV del Tiempo Ordinario A

Monición de entrada

Este domingo el Señor nos reúne alrededor de su altar, una vez más, con el banquete de la palabra y la eucaristía Jesús nos recordará que Dios no se rige según nuestras leyes y i mas de justicia. La plenitud de su ley son la misericordia y el Dispongámonos a acogerlos participando en esta celebración.

Domingo XXIV del Tiempo Ordinario A.

Monición de entrada

El Señor nos llama el domingo a participar en la eucaristía. En su presencia nos reconocemos pecadores y anhelamos el perdón de Dios, mismo tiempo que necesitamos recibirlo del hermano. La eucaristía nos invita a percibir el fruto de la misericordia de Dios para ser misericordiosos como el Padre.

Domingo XXIII del Tiempo Ordinario.

Monición de entrada

El Señor está realmente en medio de nosotros cuando los cristianos nos reunimos en su nombre. Una manifestación de la caridad cristiana es la corrección fraterna. La celebración de este domingo nos ayudará a ser más responsables unos de otros.

Ego Rosalia Sinibaldi Quisquinae et Rosarum Domini filia

 Santa Rosalía a túa,

A que bautisma teus nenos,

A que aparella teus mozos,

A que encamiña teus vellos;

Santa Rosalía, a Santa

Do colorciño trigueiro,

Domingo XXII del Tiempo Ordinario

Monición de entrada

Queridos hermanos, nos encontramos reunidos en la casa de Dios porque nuestra alma tiene sed del Dios vivo. La Palabra de Dios nos instruye cada domingo, y hoy nos exhorta a seguir al Señor, cargando con nuestra propia cruz. Con esa invitación que Dios dirige a cada uno de nosotros, nos disponemos a celebrar dignamente estos misterios.

Domingo XXI del Tiempo Ordinario.

Monición de entrada

Una misma fe nos reúne el domingo para celebrar que Cristo vive. Es la fe de la Iglesia, fundada en el testimonio de los apóstoles; de ellos, Pedro. fue el primero en confesarla al responder a la pregunta de Jesús: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?». Respondamos también nosotros profesándola en esta eucaristía y, después, con nuestras ‘vidas.

Domingo XX del Tiempo Ordinario

Monición de entrada

La Iglesia abre sus puertas a todos los hombres cada domingo. Así es la salvación de Cristo, para todos, porque todos necesitamos su misericordia. En la eucaristía que celebramos, la fe en la palabra de Dios, nos permite entrar en comunión con El. Nuestra reunión debe manifestar que somos una Iglesia acogedora, sin discriminaciones, porque también nosotros, extraños en tierra extraña, hemos sido acogidos por Dios.