Queridos diocesanos:
Con este lema “Sal de tu tierra”, la Iglesia nos llama en la Jornada Misionera Mundial a revitalizar nuestro compromiso misionero, sabedores de que “cada cristiano y cada comunidad discernirá cuál es el camino que el Señor le pide, pero todos somos invitados a aceptar esta llamada: salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio”[1].
Domund: jornada de misericordia y de caridad
Todas las comunidades cristianas de nuestra Diócesis han de sentir la necesidad de colaborar en la actividad misionera eclesial que es una gran obra de misericordia. El Papa en su Mensaje para el Domund de este año considera que esta jornada es la oportunidad para que “todas las ofertas de las diócesis, parroquias, comunidades religiosas, asociaciones y movimientos eclesiales de todo el mundo sirvan para auxiliar a las comunidades cristianas necesitadas y para fortalecer el anuncio del Evangelio hasta los confines de la tierra.