"Hola me llamo Cuaresma...

... y vengo a pasar 40 días contigo."
 
Jesús también pasó 40 días en el desierto preparándose para cumplir con la voluntad de su Padre y ser un Buen Hijo.
Durante este tiempo vamos a tener la oportunidad de ser un poco mejores, portarnos bien, obedecer a nuestros padres, ayudar a quiens tenemos alrededor...
 
Nos preparamos igual que Jesús para ser buenos, como Dios es Bueno con nosotros.

ÁNGELUS 26/02/2012. "Padece al tentador para defendernos".

Dios se dirige al hombre de forma inesperada, concreta y llena de amor, reiteró Benedicto XVI a la hora del ángelus del primer Domingo de Cuaresma, deseando que María nos acompañe y nos ayude a imprimir en nuestro corazón y en nuestra vida las palabras de Jesucristo, para convertirnos a Él. Al comenzar este santo tiempo, el Papa anima a todos a que, guiados por la fuerza y el amor de Dios y confiando en María, intensifiquen la oración, la penitencia y la práctica de la caridad, para así llegar victoriosos y purificados a la Resurrección.

Domingo I de Cuaresma.

MONICIÓN DE ENTRADA

Sed todos bienvenidos a la Eucaristía del Primer Domingo de Cuaresma. Vamos a recorrer juntos el tiempo fuerte que ya iniciamos el pasado miércoles con la imposición de la Ceniza. Hoy, Marcos con su habitual concisión y brevedad nos va mostrar el episodio de las tentaciones de Jesús en el desierto. Él, Dios verdadero y Hombre completo también fue tentado como lo somos nosotros, todos los días y a todas las horas. Deciros que la Palabra de Dios nos muestra –hoy y siempre—su fuerza para hablarnos de reconciliación, de paz, de amor. La cuaresma es tiempo de conversión, de vuelta a Dios, de mayor amor a los hermanos… y es lo que nos vamos a vivir durante las próximas semanas


Mensaje del Santo Padre Benedicto XVI para la Cuaresma 2012.

«Fijémonos los unos en los otros para estímulo de la caridad y las buenas obras» (Hb 10, 24)

Queridos hermanos y hermanas

La Cuaresma nos ofrece una vez más la oportunidad de reflexionar sobre el corazón de la vida cristiana: la caridad. En efecto, este es un tiempo propicio para que, con la ayuda de la Palabra de Dios y de los Sacramentos, renovemos nuestro camino de fe, tanto personal como comunitario. Se trata de un itinerario marcado por la oración y el compartir, por el silencio y el ayuno, en espera de vivir la alegría pascual.

Este año deseo proponer algunas reflexiones a la luz de un breve texto bíblico tomado de la Carta a los Hebreos: «Fijémonos los unos en los otros para estímulo de la caridad y las buenas obras» (10,24).

CENIZA y AYUNO.

LA CENIZA que Dios quiere:

    Que no te gloríes de tus talentos, sino que con ellos edifiques a los demás.
    Que no te deprimas ni te acobardes, porque Dios es tu victoria.
    Que aprecies el valor de las cosas sencillas.
    Que valores más la calidad que la cantidad.
    Que estés abierto a la esperanza.
    Que no temas la muerte, porque siempre es Pascua..

AUDIENCIA GENERAL. Miércoles de Ceniza.

AUDIENCIA GENERAL
Sala Pablo VI, Miércoles 22 de febrero de 2012
Miércoles de Ceniza


Queridos hermanos y hermanas:

En esta catequesis quiero hablar brevemente del tiempo de Cuaresma, que comienza hoy con la liturgia del Miércoles de Ceniza. Se trata de un itinerario de cuarenta días que nos conducirá al Triduo pascual, memoria de la pasión, muerte y resurrección del Señor, el corazón del misterio de nuestra salvación. En los primeros siglos de vida de la Iglesia este era el tiempo en que los que habían oído y acogido el anuncio de Cristo iniciaban, paso a paso, su camino de fe y de conversión para llegar a recibir el sacramento del Bautismo. Se trataba de un acercamiento al Dios vivo y de una iniciación en la fe que debía realizarse gradualmente, mediante un cambio interior por parte de los catecúmenos, es decir, de quienes deseaban hacerse cristianos, incorporándose así a Cristo y a la Iglesia.

Santa Misa, Bendición e Imposición de la Ceniza. Homilía del Santo Padre.

Basílica de Santa Sabina
Miércoles de Ceniza, 22 de febrero de 2012



Venerados hermanos,
queridos hermanos y hermanas:


Con este día de penitencia y de ayuno —el miércoles de Ceniza— comenzamos un nuevo camino hacia la Pascua de Resurrección: el camino de la Cuaresma. Quiero detenerme brevemente a reflexionar sobre el signo litúrgico de la ceniza, un signo material, un elemento de la naturaleza, que en la liturgia se transforma en un símbolo sagrado, muy importante en este día con el que se inicia el itinerario cuaresmal.

Carta Pastoral para la Cuaresma 2012.

“Velar por Dios y velar por el hombre. Volver a Dios y volver al hombre”

Queridos diocesanos:
La Cuaresma “es un tiempo propicio para que, con la ayuda de la Palabra de Dios y de los Sacramentos, renovemos nuestro camino de fe, tanto personal como comunitaria”1, y respondamos a la llamada a la conversión que exige conformarnos con Cristo “que se entregó por nosotros como oblación y víctima de suave aroma” (Ef 5,2), despojarnos del hombre viejo con sus obras, y revestirnos del Hombre Nuevo, Cristo, que lo es todo en todos (cf. Col 3,10-11).
La liturgia cuaresmal nos ayuda a recordar “al hombre tal como ha sido querido por Dios, tal como Él lo ha elegido eternamente, llamado, destinado a la gracia y a la gloria”.

ÁNGELUS 3/04/2011, "Una vida iluminada por Cristo es libre y realizada".

Ángelus / Regina Coeli
Plaza de San Pedro. Domingo 3 de abril de 2011.

Queridos hermanos y hermanas:

El itinerario cuaresmal que estamos viviendo es un tiempo especial de gracia, durante el cual podemos experimentar el don de la bondad del Señor para con nosotros. La liturgia de este domingo, denominado «Laetare», nos invita a alegrarnos, a regocijarnos, como proclama la antífona de entrada de la celebración eucarística: «Festejad a Jerusalén, gozad con ella, todos los que la amáis; alegraos de su alegría, los que por ella llevasteis luto; mamaréis a sus pechos y os saciaréis de sus consuelos» (cf. Is 66, 10-11). ¿Cuál es la razón profunda de esta alegría? Nos lo dice el Evangelio de hoy, en el cual Jesús cura a un hombre ciego de nacimiento. La pregunta que el Señor Jesús dirige al que había sido ciego constituye el culmen de la narración: «¿Crees tú en el Hijo del hombre?» (Jn 9, 35). Aquel hombre reconoce el signo realizado por Jesús y pasa de la luz de los ojos a la luz de la fe: «Creo, Señor» (Jn 9, 38).

Domingo V de Cuaresma (10/04/2011).

MONICIÓN DE ENTRADA

Sed todos bienvenidos de este Quinto Domingo de Cuaresma, que es el último ya. El evangelista San Juan nos cuenta el relato de la resurrección de Lázaro, en Betania. Jesús de Nazaret llega a Betania, al lado de Jerusalén, aún a sabiendas que sus enemigos le buscan para matarle. No importa. Tiene la misión de resucitar a Lázaro, su amigo. La narración del evangelista Juan nos volverá a impresionar por su belleza… Os decíamos que estamos en el último domingo de Cuaresma. El próximo es ya el Domingo de Ramos y comenzaremos la Semana Santa, la semana grande de nuestra fe que nos encamina hacia la Cruz y hacia Resurrección. Nos convendría reflexionar a una semana del final de la cuaresma si hemos aprovechado el tiempo y si estamos preparados para vivir con intensidad la Semana Santa… Pero, ahora, con devoción y entrega iniciemos la Eucaristía.

Reflexión misionera para la Liturgia del Domingo V de Cuaresma.

"Cuando, en el quinto domingo, se proclama la resurrección de Lázaro, nos encontramos frente al misterio último de nuestra existencia: «Yo soy la resurrección y la vida... ¿Crees esto?» (Jn 11, 25-26). Para la comunidad cristiana es el momento de volver a poner con sinceridad, junto con Marta, toda la esperanza en Jesús de Nazaret: «Sí, Señor, yo creo que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que iba a venir al mundo» (v. 27). La comunión con Cristo en esta vida nos prepara a cruzar la frontera de la muerte, para vivir sin fin en él. La fe en la resurrección de los muertos y la esperanza en la vida eterna abren nuestra mirada al sentido último de nuestra existencia: Dios ha creado al hombre para la resurrección y para la vida, y esta verdad da la dimensión auténtica y definitiva a la historia de los hombres, a su existencia personal y a su vida social, a la cultura, a la política, a la economía. Privado de la luz de la fe todo el universo acaba encerrado dentro de un sepulcro sin futuro, sin esperanza".
Mensaje del Papa para la Cuaresma 2011

Reflexiones

PLAN CUAREMA 2011, SANXENXO.

Publicamos los horarios y toda la programación especial para vivir intensamente esta  Cuaresma 2011.

- Ejercicio Cuaresmal del 09 de Marzo al 17 de Abril.
Horarios para todos los días.
19:30 Estación penitencial correspondiente. Confesiones.
20:00 Santa Misa con predicación.

AUDIENCIA GENERAL, 6/04/2011. Santa Teresita del Niño Jesús.

6/04/2011, AUDIENCIA GENERAL (Plaza de San Pedro).
TIEMPO DE CUARESMA.


Santa Teresita del Niño Jesús

Queridos hermanos y hermanas:

Me detengo hoy en la figura de santa Teresita del Niño Jesús, monja carmelita que vivió apenas veinticuatro años, al final del siglo diecinueve. Una vida escondida que ha tenido una relevancia crucial en la historia de la espiritualidad de la Iglesia contemporánea, hasta el punto de ser declarada patrona de las misiones por el Papa Pío once, y doctora de la Iglesia por el venerable Juan Pablo segundo. Su mensaje se nos muestra en el libro Historia de un alma. En él, santa Teresita nos narra las etapas de una intensa y profunda historia de Amor con Jesús desde su infancia hasta su muerte.

Domingo IV de Cuaresma. El Domingo de la Alegría y de la luz.

MONICIÓN DE ENTRADA

Bienvenidos queridos hermanos a la Eucaristía de este IV domingo de Cuaresma. Siempre, durante muchos siglos, se ha llamado a este domingo, el de la alegría, el domingo “laetare” que significa “alegraos”, tal como dice la antífona de entrada con la que el sacerdote inicia esta celebración. Pero es también el domingo de la Luz. Cristo nos permite ver. Cura nuestra ceguera y nos muestra la belleza del mundo que nos rodea. Jesús es luz y camino. Verdad y vida. Y para verle hay que convertirse, hacerse humilde ante quien siendo Dios se humilló para enseñarnos a vivir. La Cuaresma avanza y el próximo domingo –el quinto—ya será el último. Al siguiente comienza la Semana Santa. Seguimos, pues, subiendo la Cuaresma, camino de la Cruz y de la Resurrección.

VIA CRUCIS: Acompañando al Señor durante la Cuaresma con Lolo.

I.- JESÚS CONDENADO A MUERTE
Treinta y tres años tenía Él y esa mañana era también de primavera. Sol, flores,fiesta y... tenerse que morir irremediablemente a una hora fija.
¡Si al menos le matasen bajo techo! Pero no: a la hora del mediodía, encaramado en un altozano y viendo azulear tranquilamente el humo jubiloso de chimeneas y dorarse la campiña, los montes y la dulce lejanía. ¡Qué bonita es la vida, Jesús; y qué pena también que a Ti te la hagan ahora sangre y te den la muerte. Pero, ¿qué has podido hacer, tan grave, al margen de dar vista a los ciegos o multiplicar el copo de las barcas?
(Cartas con la señal de la Cruz, p. 164)
 

Reflexión Misionera para la Liturgia del IV Domingo de Cuaresma.

El ciego de nacimiento: ve, cree y anuncia.

El camino hacia la Pascua está marcado por grandes temas catequético-bautismales: la lucha con el tentador, contemplar el rostro de Cristo, los símbolos de agua, luz, vida. En el Evangelio de este domingo es central la figura de Jesús-luz: Él es el que ve al ciego y va a su encuentro, le unta con barro los ojos, le ordena lavarse en la piscina de Siloé (que significa Enviado). El ciego va, se lava y vuelve con vista (v. 1.6-7). El signo es claro, pero tan solo para el que sabe verlo. Justamente, ese milagro tan patente de Jesús se convierte en signo de contradicción: ante el mismo hecho se producen dos reacciones (la del ciego y la de los fariseos) en direcciones opuestas.

El ciego avanza, gradualmente, hacia el descubrimiento del rostro-identidad de Jesús: de un mero hombre a un profeta, hombre de Dios, Señor… hasta postrarse con fe: “¡Creo, Señor!” (v. 38).

VIACRUCIS para los niños! TIEMPO DE CUARESMA.



AYUNO de CUARESMA!

Ayuna de juzgar a otros; llénate del Cristo que vive en ellos.

Ayuna de palabras hirientes; llénate de frases que purifican.

Ayuna de descontento; llénate de gratitud.
 
Ayuna de enojos; llénate de paciencia.

Ayuna de pesimismo; llénate de optimismo.

Ayuna de preocupaciones; llénate de confianza en Dios.

Benedicto XVI visita el MAUSOLEO DE LAS FOSAS ARDEATINAS.

ORACIÓN DEL SANTO PADRE BENEDICTO XVI
Domingo 27 de marzo de 2011 -  Fosas Ardeatinas, Roma

Salmo 23- Oración

El Señor es mi pastor, nada me falta:
en verdes praderas me hace recostar;
me conduce hacia fuentes tranquilas
y repara mis fuerzas;
me guía por el sendero justo,
por el honor de su nombre.
Aunque camine por cañadas oscuras,
nada temo,
porque tú vas conmigo:
tu vara y tu cayado me sosiegan.

ÁNGELUS 27/03/2011. "Jesús nos espera para hablar a nuestro corazón".

Ángelus / Regina Coeli
(Plaza de San Pedro)
Domingo 27 de marzo de 2011.

Queridos hermanos y hermanas:

Este tercer domingo de Cuaresma se caracteriza por el célebre diálogo de Jesús con la mujer samaritana, narrado por el evangelista san Juan. La mujer iba todos los días a sacar agua de un antiguo pozo, que se remontaba a los tiempos del patriarca Jacob, y ese día se encontró con Jesús, sentado, «cansado del camino» (Jn 4, 6). San Agustín comenta: «Hay un motivo en el cansancio de Jesús... La fuerza de Cristo te ha creado, la debilidad de Cristo te ha regenerado... Con la fuerza nos ha creado, con su debilidad vino a buscarnos» (In Ioh. Ev., 15, 2). El cansancio de Jesús, signo de su verdadera humanidad, se puede ver como un preludio de su pasión, con la que realizó la obra de nuestra redención. En particular, en el encuentro con la Samaritana, en el pozo, sale el tema de la «sed» de Cristo, que culmina en el grito en la cruz: «Tengo sed» (Jn 19, 28). Ciertamente esta sed, como el cansancio, tiene una base física. Pero Jesús, como dice también Agustín, «tenía sed de la fe de esa mujer» (In Ioh. Ev., 15, 11), al igual que de la fe de todos nosotros.

Enlaces Parroquiales

Parroquia San Gines de Padriñan. Comunidad Parroquial.

"TRANSFORMANDO EL MUNDO HACIENDO IGLESIA"