Monición de entrada.
De nuevo nos reunimos para celebrar la Eucaristía en el domingo, el Día del Señor, que hoy es como un eco de la fiesta de Navidad, como escucharemos en las lecturas. Dios es el principio y el fin, y hacia Él nos atrae a todos. Pero a la vez es el Dios del camino, que comparte con nosotros todos los avatares de la marcha, la fatiga y la esperanza de cada jornada.